¿Te has dado cuenta de que la riñonera se ha vuelto cada vez más popular en el mundo de los viajes? Ese modesto y práctico accesorio que solía ser objeto de burla en los años 80 y 90 ha regresado con fuerza y se ha convertido en el mejor aliado de los viajeros de hoy en día. Pero ¿qué es lo que hace que la riñonera sea tan especial y por qué debería ser un elemento imprescindible en tu lista de equipaje? ¡Sigue leyendo para descubrirlo!
- Comodidad en movimiento: Uno de los aspectos más destacados de la riñonera es su comodidad. Al llevarla alrededor de la cintura, liberas tus hombros y espalda de cualquier peso innecesario. Te da libertad de movimiento y una sensación de ligereza que te permite disfrutar plenamente la experiencia del viaje.
- Fácil acceso y organización: ¿Alguna vez has estado en una situación en la que necesitas sacar rápidamente tu pasaporte o tu tarjeta de embarque, pero tienes que rebuscar en tu bolso o mochila? Con una riñonera, eso se convierte en cosa del pasado. Todos tus objetos esenciales están al alcance de tu mano.
- Organización: La mayoría de las riñoneras están diseñadas con múltiples compartimentos y bolsillos, lo que te permite mantener tus pertenencias organizadas y accesibles en todo momento.
- Seguridad mejorada: La riñonera se lleva pegada al cuerpo, y eso les pone las cosas muy difíciles a los amantes de lo ajeno. Además, muchos modelos cuentan con compartimentos ocultos, cierres de seguridad o materiales resistentes al agua que protegen tus objetos de valor de robos o condiciones climáticas adversas.
Olvida la idea de que la riñonera forma parte del pasado ochentero y vuélvela a usar. Las hay para todos los gustos y necesidades. Incluso hay diseños minimalistas para la práctica deportiva y para los amantes de las actividades al aire libre. Puedes encontrar la riñonera perfecta que se adapte a tu estilo personal y a tus preferencias.
También encontrarás en el mercado algunos modelos pensados para ir debajo de la ropa y no ser visibles. Aunque a mí personalmente no me gusta la idea. Porque al dar más volumen hace que la ropa te apriete y da calor.
En las fotos te muestro algunos ejemplos de cada, sin olvidar las primerísimas riñoneras ochenteras, con sus fosforitos y sus brillos. ¿Quién no tubo la suya? (combinada con esos chándal de colores… en fin)
¿Quieres saber qué llevo yo dentro de la riñonera en los viajes a Senegal y Gambia?
- Pasaporte
- Billetes de avión y tarjetas de embarque (en los días de vuelo).
- Tres pequeños monederos: Uno para cada moneda del viaje (EUR, GMD y CFA)
- Tarjeta de crédito.
- Teléfono móvil.
- Pañuelos
- Gafas de sol
- Llave del vehículo y/o de la habitación.
- Loción antimosquitos.
- Crema solar.
- Minilibreta y boligrafo
En mi caso, me gusta llevar un modelo que sea amplio y que tenga como mínimo un bolsillo interior con cremallera. Allí suelo guardar las cosas que no quiero que se caigan cuando abra para sacar cualquier otra cosa. Son el pasaporte, los monederos y la tarjeta de crédito. Las únicas tres cosas de valor que llevo.
Aprovecho para comentarte que ni Gambia, ni Senegal son países inseguros. Al contrario, en ningún momento sufres por tus cosas. Es más, si te dejas alguna cremallera abierta, o se te cae algo, siempre te avisan.
Hay momentos en que me canso de llevar la riñonera a la cintura. Entonces me practico el llevarla cruzada como un bolso de bandolera, pero quedando en la parte delantera, para llegar a todos los bolsillos. Te pongo una foto para que se entienda.
En conclusión, la riñonera ha evolucionado de ser objeto de risas a convertirse en el mejor aliado para los viajeros. Y los viajeros vintage, lo sabemos. Porque con los años nos vamos volviendo más prácticos.
Su comodidad, facilidad de acceso, seguridad mejorada y versatilidad hacen de ella un accesorio imprescindible en cualquier aventura. No importa si eres un viajero frecuente o si solo planeas una escapada ocasional, no subestimes el poder de la riñonera para hacer de tus viajes una experiencia más cómoda y segura.
Te animo a que lo pruebes en una de nuestras próximas expediciones mochileras a Gambia y Senegal.
Te va a encantar. La riñonera y el viaje, claro.